Capítulo 819
“Si le hubieras dicho a Lucia sobre la existencia de ese chico, ella también le habria dado algo de dinero para que pudiera estudiar bien y crecer de manera adecuada“, dijo Leticia con indignación ¿Pero tu? Has cambiado su vida y, como no puedes obtener ningún valor monetario de él, lo has dejado a merced de los demás, sin educación, sin estudios, convirtiéndolo en lo que es ahora. ¿Aún tienes conciencia?“.
Guzmán se quedó paralizado ante las palabras de Leticia. Nunca habia pensado en eso. De hecho, por un breve momento, habia sentido un poco de culpa hacia Borja
Después de todo, era su propio padre quien habia desencadenado esta serie de tragedias.
Nunca se le habia ocumdo que el también era una de las victimas.
“Es el castigo que merece, es el hijo de un pecador“, gritó Oliver con todas sus fuerzas.
Como si al subir el volumen de su voz, tuviera más razón.
Guzmán soltó una carcajada después de escucharlo “En el incidente de la fábrica de productos químicos, yo no hice nada, no fui yo quien vertió las aguas residuales, no fui yo quien robó el dinero de las víctimas. Incluso hoy, no soy yo quien quiere matar al niñol ¿Qué culpa tengo yo ahora?“.
Guzmán termino de hablar y luego miró fijamente a Oliver, quien se había puesto pálido: “Aunque no tengo empleo, tengo la conciencia tranquila, no he perjudicado a nadie, ¿y tu?”
Oliver se tambaleó y casi no pudo mantenerse en pie.
Instintivamente, quiso aferrarse al brazo de Borja, pero él se aparto de inmediato.
Oliver casi cae, pero logra mantenerse en pie gracias a la pared. Luego miró a Borja con incredulidad: “Borja?”
¿Te has quedado con el dinero de mis padres?“, le preguntó a Oliver, palabra por palabra.
Oliver tenia una expresión distorsionada: “¿No me crees? Somos familia, ¿no me crees?“.
“Ella dijo que hay pruebas, te pregunto por última vez, ¿te has quedado con la indemnización de mis padres?“, gritó Borja.
Oliver temblo al escuchar esto y luego miró a Leticia.
Leticia ya se habia vuelto a sentar y estaba tomando el té con tranquilidad, sin mirar en su dirección.
“No la mires, respondeme!“. Borja estaba al borde del colapso, las lágrimas brotaban de sus ojos.
“Vamos a la comisana, Borja Hablaremos de todo esto una vez que todo se resuelva, ¿te parece?“, le propuso Oliver, con lágrimas en los ojos.
Se podia ver que realmente tenía un afecto profundo, hasta de verdad por Borja.
Borja evitó su mano: “Si no me dices la verdad, iré a la comisaría y diré que he matado a alguien, que me condenen a muerte! ¡O me iré con Israel, él de seguro no me dejará vivir!”
“No hagas eso, exclamó Oliver, moviendo las manos en señal de negación.
“Entonces dime toda la verdad ahora!“, gntó Borja Fernández.
Oliver volvió a mirar a Leticia, esta vez con una mirada llena de resentimiento.
Leticia hizo como si no lo viera y siguió tomando su té
Miguel, al ver a Oliver mirando en su dirección, le devolvió la mirada con una intensidad aún mayor.
Oliver retro la murada y, frente a Borja, bajo la cabeza y finalmente dijo, como si se resignara: “Si, la verdad que si me quedé con ese dinero
Las pupilas de Borja temblaban violentamente por un momento, luego la última luz en sus ojos se fue apagando lentamente.
unia es una local, exclamó Oliver, levantando la cabeza y agarrando la mano de Borja con emoción. “Trabajé para ella durante treinta años y nunca me valoró No podia soportarlo más y solo queña alejarme de ella lo más rápido posible, de cualquier manera”
Asi que te convertste en un ladrón?“, le preguntó Borja