Tu Leti Ya Está Muerta Llámam Leticia Capítulo 1060

Capítulo 1060 

Leticia recibió el mensaje cuando ella y Dulcia acababan de entrar al garaje. Leticia lo miró y luego pasó el teléfono a Dulcia. 

Después de leer el mensaje, Dulcia parecia preocupada y dijo: “¿Acaso Guillermo ha descubierto algo y está utilizando a Leo para engañamos?” 

Leticia se sorprendió un poco, luego sonrió, “Así que ya no te gusta Leo, ¿eh? ¿Incluso lo ves como un enemigo ahora?” 

Dulcia le dio un suave golpe a Leticia: “Deja de burlarte de mi, ¿qué vamos a hacer?” 

*¿Qué hacer? Si quiere colaborar conmigo, entonces colaboraremos. También quiero ver cómo va a enfrentarse a su padre.” Justo en ese momento, llegó otro mensaje de Leo. 

“Si estás interesada, nos vemos mañana a las diez en la funeraria donde está el cuerpo de Linda 

“¿Por qué deberíamos ir alli? Dulcia funció el ceño de inmediato 

No queria que ningún miembro de la familia Escobar volviera a molestar a su madre. 

“¿Quién sabe?” dijo Leticia, “Iré yo sola mañana.” 

“No!” Dulcia se opuso de inmediato, “Tenemos que ir juntas. Lo conozco muy bien, si está mintiendo, ime daré cuenta!” 

Leticia notó que Dulcia ya no tenia ningún sentimiento por Leo. 

Sonrio y asintió: “Pero tienes que decirle a tu esposo sobre esto” 

“Está bien.” Dulcia asintió. 

Luego, pareció recordar algo. 

“No quiero decirle.” 

Leticia: “¿Qué?” 

“¿No fue a ver a Guillermo? No me lo dijo:” Dulcia murmuro. 

“¿Qué podría decirle Guillermo?” Leticia le frotó la cabeza, “Probablemente pensó que no era necesario preocuparte.” 

En ese momento, alguien golpeó la ventana del carro 

Leticia miró hacia afuera y vio a Israel Herrera inclinado al lado, mirándola con resignación. 

No habla estado en casa todo el día, y no subia al llegar 

Leticia salió del carro 

“¿Todavia no te has ido a dormir?” 

“Temia que te secuestraran Israel le quito la bolsa de los hombros 

“Con todos sus guardaespaldas a su alrededor, ¿quién podria secuestrarla? Dulcia se bajo del carro, murmurando en protesta. 

Leticia empezó a reir de inmediato. 

“¿De qué sirve un guardaespaldas si te la llevas todo el dia?” Israel respondió sin piedad. 

“Estábamos tratando asuntos importantes!” 

“Ya es tarde, ¿quieren despertar a la abuela y a los niños?” Leticia funció el ceño. 

No sabia si Dulcia se había vuelto más valiente o si Israel se habia vuelto más paciente, pero de alguna manera habian empezado a discutir 

La casa de Leticia no era pequeña, pero tampoco era tan grande. 

Desde que llegó la abuela Méndez, la última habitación de huéspedes también estaba ocupada. 

Y eso sin contar la habitación que Israel tenia aunque no se quedaba en ella. 

Al entrar a la casa, percibieron un aroma delicioso 

Habian estado ocupadas todo el día, apenas tuvieron tiempo para comer algo rápido 

“Ya han vuelto.” Hazel, con un delantal, salió de la cocina y al ver a Dulcia, sonrió amablemente.